Las pilas de litio-ion también sufren 'efecto memoria"
Debido a una densidad alta de energía, las baterías de litio níquel-cadmio y de níquel-metal hidruro se instalan en casi todo tipo de aparatos electrónicos siendo la creencia extendida que este tipo de baterías no presentan el llamado "efecto memoria". Con este denominativo es como los entendidos llaman a una desviación en el voltaje de la batería que puede limitar la utilización de la energía acumulada, así como la capacidad para saber el estado de carga de la batería de forma fiable. Sin embargo, los científicos de la PSI Paul Scherrer Institute y los laboratorios de Toyota en Japón han descubierto en unos estudios de laboratorio un efecto memoria en las pilas litio níquel-cadmio. Este descubrimiento es muy relevante para el uso de este tipo de baterías en vehículos eléctricos. Este estudio ha sido publicado en la revista de ámbito científico Nature Materials.
Casi todos los dispositivos de uso cotidiano obtienen la energía necesaria para funcionar de una batería pero no siempre este proceso puede resultar tan ¨inteligente¨ como se describe en la publicidad y en muchos casos cuentan con una especie de memoria. Un maquina de afeitar o un cepillo de dientes suelen recargarse antes que la batería se agote, después la batería parece recordar que solo se ha tomado parte de su capacidad de almacenamiento y por ultimo, ya no entrega su energía total.
Los entendidos en este campo hacen referencia e esto como ¨efecto memoria¨ producido a que el voltaje de trabajo de la batería cae con el tiempo, causado por los ciclos incompletos de carga y descarga. Todo esto significa que a pesar de que la batería esta siendo descargada, la tensión de trabajo que suministra en determinadas ocasiones es demasiado baja para activar el dispositivo en cuestión.
Por lo tanto, podemos afirmar que el ¨efecto memoria¨ tiene dos consecuencias negativas: en primer lugar: la capacidad útil de la batería se reduce, y en segundo lugar la correlación existente entre la tensión y el estado de la carga se desplaza, de esta manera esta ultima no puede ser determinada de forma fiable sobre la base de la tensión.
Ahora sabemos que el ¨efecto memoria¨ afecta a las baterías de litio níquel-cadmio y de níquel-metal hidruro desde que se empezaron a comercializar con gran éxito haya por el año 1990 todo lo contario de lo que se pensaba inicialmente según a demostrado este estudio.
Las pilas de litio-ion también sufren 'efecto memoria'
Sin embargo, los científicos de la PSI Paul Scherrer Institute y de los laboratorios de Toyota en Japón han descubierto ahora un efecto de memoria en una batería de litio-ion. Este hallazgo es particularmente relevante para el uso de baterías de iones de litio en el mercado de vehículos eléctricos. El trabajo ha sido publicado en la revista científica Nature Materials.
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